El sexto álbum de estudio de Melody Gardot, Entre eux Deux, es minimalista y a la vez expansivo. Es su primer disco grabado solo con piano, sin banda completa, y es una colaboración con el pianista Philippe Powell, a quien llama “el Bill Evans de Brasil”. Ambos escribieron el álbum juntos en su apartamento en París, inspirándose en la vista de la Torre Eiffel.

Las canciones del álbum suenan como clásicos olvidados del jazz y la chanson francesa, aunque son composiciones originales. A diferencia de su álbum anterior, Sunset in the Blue (2020), que incluía estándares como Moon River, este disco apuesta totalmente por nuevas creaciones con un sonido atemporal.

Gardot no se preocupa por los géneros, sino por la calidad de las canciones. Considera que su música es de nicho y no pretende competir con el pop comercial, sino crear arte que pueda resonar con quienes lo descubran. Aunque alguna vez le sugirieron hacer un disco de piano sola, no se sintió lista hasta conocer a Powell, cuya destreza y sensibilidad musical la convencieron de compartir el proceso creativo con él.

Powell, hijo del legendario guitarrista brasileño Baden Powell, creció en París y se siente influenciado tanto por la música brasileña como por la francesa. Su conexión con Gardot surgió naturalmente cuando ella le propuso escribir juntos, siguiendo un método tradicional de convivencia y composición intensiva. Durante dos semanas, escribieron una canción al día, fusionando su amor por el jazz y la música clásica.

El álbum es descrito como un “baile” entre los dos músicos, una interacción fluida donde ninguno pisa los pies del otro. Incluye canciones ligeras como À La Tour Eiffel y Fleurs du Dimanche, pero también temas melancólicos sobre el amor y la tristeza, con letras profundas que evocan el espíritu de los grandes estándares del jazz.

En definitiva, Entre eux Deux es una obra íntima, elegante y atemporal, donde la voz de Gardot y el piano de Powell se entrelazan en un diálogo musical sofisticado.